En búsqueda de versionar una vez más mis laberintos y retazos, me encontré escribiendo (de nuevo) mi camino hacia la orilla. Encontrando nuevas esquinas, personajes, caminos, vivencias, dentro y fuera del agua.
Llegando aquí, a entregarte este poemario. Como la suma de partes que exigen ser liberadas, para ser eco de quien pueda de ellas adueñarse, madera de quien fuese hoguera y aire para quien necesite respirar…
poemario
El Agua también quema
El presente poemario recorre un viaje único dentro y fuera del laberinto que solemos formar cuando estamos por vivir (o viviendo) un punto de inflexión, descubrimiento o cambio de piel. Viaje al que todos hemos estado (o estaremos) expuestos en algún momento. Pues, es a través de perdernos y encontrarnos, que avanzamos.
Dentro y fuera del mar, ida y vuelta
Con los laberintos ya formados, las preguntas hechas y la oscuridad atravesada, en el poemario (el agua también quema) se dibuja el laberinto. Como quien vive del mar y necesita salir y entrar en él para poder respirar.
Trayendo a colación un espacio donde las “almas de agua” se sientan reconocidas y puedan ser. Así como un sin fin de palabras hechas rima, como voz, grito y silencio.
Que si vamos a arder…
En frío y en hoguera, este poemario es un testimonio y a la vez un punto de vista compartido. Donde puedes ser tu, donde podemos hallarnos tal cual somos. Intensos, infinitos, imperfectos… rotos y completos. Porque no se trata de solo soltar lo vivido, sino de recoger los trozos para crear puentes y encender la llama que llevamos dentro. Para arder, dentro y fuera del mar.